“Kill or be Killed” es un cómic de género negro, creado por el guionista Ed Brubaker y el dibujante Sean Phillips, con la colaboración de la colorista Elizabeth Breitweiser. Se trata de una obra que se publicó originalmente en 20 números entre 2016 y 2018, y que ahora se recopila en un solo volumen, el formato Omnibus, por la editorial Evolution Comics.
La historia gira en torno a Dylan, un joven estudiante de Nueva York que sufre una depresión y que intenta suicidarse. Sin embargo, sobrevive milagrosamente y descubre que ha hecho un pacto con un demonio: debe matar a una persona al mes, o de lo contrario, el demonio lo matará a él. Así, Dylan se convierte en un justiciero que elige a sus víctimas entre criminales, corruptos y malvados, mientras intenta mantener su vida normal, su relación con su novia Kira y su amistad con su compañero de piso Mason.
El cómic es una reflexión sobre la moralidad, la violencia, la justicia y el destino, que plantea dilemas éticos al lector y al protagonista. ¿Es lícito matar a alguien por un bien mayor? ¿Qué consecuencias tiene para la mente y el alma de Dylan? ¿Es real el demonio o es una alucinación? ¿Qué papel juegan los medios de comunicación y la sociedad en la percepción de los hechos?
Una pareja de autores que garantiza resultados
“Kill or be Killed” es una obra que sigue la estela de otras colaboraciones entre Ed Brubaker y Sean Phillips, dos autores que llevan más de 20 años trabajando juntos y que han creado cómics de gran calidad y éxito, como “Criminal”, “Fatale”, “The Fade Out” o “Pulp”. Su estilo se caracteriza por el uso del género negro, con influencias del cine, la literatura y la historia, y por la creación de personajes complejos, con conflictos internos y externos, que se mueven en ambientes oscuros y violentos.
El guion de Brubaker es ágil, inteligente y sorprendente, con diálogos naturales y narraciones en primera persona que nos acercan a la mente de Dylan. Es otra de esas obras intrincadas pero que no supone un esfuerzo extra para el lector. Además, muestra algunas innovaciones en cuanto a la narrativa muy interesantes, que permite a Phillips lucirse, como esas dobles páginas con ilustraciones y textos en los laterales.
El dibujo de Phillips es expresivo, realista y detallado, con trazo firme. El color de Breitweiser es clave para crear la atmósfera adecuada, con tonos fríos, oscuros y saturados, que contrastan con los momentos de luz y calidez.
“Kill or be Killed” es un cómic que engancha desde la primera página, que nos hace reflexionar sobre el bien y el mal, y que nos muestra el talento de unos autores que dominan el arte secuencial. Un cómic que merece la pena tener en tu colección, sobre todo en este formato Omnibus, que incluye extras como bocetos, portadas alternativas y comentarios de los autores.
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